TARTA DE LA “ABUELITA” ISABEL
Como se ha visto hasta ahora, los dulces no son nuestro punto fuerte, pero poco a poco, dominaremos ese campo. Que mejor para seguir nuestro proceso iniciático, que esta maravillosa tarta. Posiblemente sea la que más me gusta. Es una tarta que casi todos conoceréis porque alguien en vuestra familia la hace; en este caso, la que la prepara es Isabel Noqué, vamos, mi “otra Suegra”. La receta es la que utilizaba su abuela con la que como habréis adivinado ya, comparte el nombre. Siempre que la prepara me como toda la que me dejan…
¿Quién dijo que las cosas sencillas no son maravillosas? Isabel, muchas gracias por la receta y por agasajarme con semejante manjar.
Ingredientes (para una buena fuente)
1 caja de galletas Chiquilín (son un elemento clave. Isabel mantiene que esas son las que usaba su abuela, mientras que Carmen, su madre, dice que eran galletas María. Queda en vuestras manos hacerla con las dos clases y formaros una opinión al respecto. La mía está clara)
500 Cl. de leche
100 grs. de azúcar
1 tableta de chocolate Valor a la taza
500 Cl. de nata líquida para montar (35 % de materia grasa)
Cacao en polvo (vamos, un poquito de Cola Cao)
Utensilios
1 batidora con su accesorio correspondiente para montar nata
1 cacerola
1 cazo
1 cuchara de madera
1 varilla o batidor
1 fuente para montar la tarta (Isa es una profesional y la monta a “pelo”, pero mejor empezamos con una fuente)
1 lengua
2 boles
Preparación
En primer lugar nos lavamos las manos. Ponemos la nata en el congelador para bajarle la temperatura y el bol en el que la vamos a montar, en la nevera (como explicamos en la receta del 21 de abril de 2008). Montamos la nata y la reservamos en el frigo. Ponemos a calentar toda la leche. Reservamos dos vasos en un bol y el resto, lo llevamos a ebullición. Justo antes de que hierva, añadimos el chocolate cortado en trocitos (para facilitar su fusión) y lo removemos bien hasta su completa disolución. Reservamos. Diluimos un par de cucharas soperas de azúcar en la leche que tenías apartada en un bol.
Tras estos preliminares es el momento de comenzar el montaje de la tarta. La tarta sigue la estructura de un milhojas, es decir, capas alternas de ingredientes, que repetiremos hasta que se acaben los mismos. Manos a la obra.
Mojamos ligeramente las galletas en la leche azucarada, para acto seguido colocarlas en el molde hasta cubrir el fondo. A continuación, colocamos una capa de chocolate y lo igualamos con la lengua. La siguiente capa que alternaremos es la de galletas (previamente mojadas en la leche) que dará paso a una capa de nata montada, que volveremos a igualar con la lengua, como si fuéramos albañiles y estuviéramos pasando la llana. Así seguiremos el esquema hasta que se nos acaben los ingredientes. Si bien es cierto, la última capa debe ser de nata, para poder acabar el postre espolvoreando un poco de cacao. La disposición de las capas podría ser el siguiente:
CACAO
NATA
GALLETAS
NATA
GALLETAS
CHOCO
GALLETAS
NATA
GALLETAS
CHOCO
GALLETAS
Es una tarta que necesita un cierto reposo, por lo que debéis prepararla con unas horas de antelación. Éxito garantizado.
GRACIAS ISABEL
Buena Suerte y Buen Provecho
Comentarios
más fácil imposible
PERO ESTA TIENE MUY BUENA PINTA,
¡COMO ESTAN LAS GALLETAS CHIQUILIN!!!!!!!1
Menuda pinta, la boca agua.
A mi me gustaría que nos enseñaras hacer una tarta como las de las patelerias, la típica tarta de cumpleaños.
Ah, y como hacer un cobertura de chocolate duro...
Cierto que te debo la receta de la cobertura, no te preocupes. Vamos a ver como doy forma a la receta fácil para una tarta de cumpleaños resultona...me pongo con ello. Besos.
Un abrazo, Salazar