Higaditos de pollo en salsa


 

La receta de hoy es un clásico de las casas de antes y de las barras de los bares auténticos, los que nos gustan. Su protagonista no es otro que los humildes higaditos de pollo. Son baratos, fáciles de encontrar y cocinar, además de una fuente de hierro, ácido fólico y vitaminas A y B 12. Pero cuidado, son muy ricos en colesterol...por lo que no conviene abusar de ellos ni del pan para mojar en la salsa.

La mayoría de las pollerías los tienen en sus mostradores y no son pocas las grandes superficies que los albergan en sus lineales. Su precio oscila entre los 2'5 y los 3 euros el kilo. Si hay suerte puede que vengan con los corazones.

La receta que viene a continuación es una modificación de la que hacía mi Abuela Vicenta y sigue haciendo mi madre. Yo a diferencia de ellas le añado guindilla, pimienta y pimentón agridulce. Probad y me contáis cual de las 2 os gusta más.

Cuando trabajábamos en 99 Sushi Bar era un clásico de la comida para "la familia". A todos les gustaban, pero a Víctor y a las "filipinchis" les encantaban.

Ingredientes para un buen aperitivo:


Higaditos de pollo:500 gramos

Cebolla dulce: 1 grande

Guindilla: 1 unidad (opcional)

Sal: cantidad suficiente

Pimienta negra: generosos

Vino blanco: 150 ml

Pimentón agridulce: 1 cucharada de cafe

Ajo: 2 dientes

AOVE: cantidad suficiente 


Utensilios


Tabla de corte:1

Cuchillo cebollero: 1 

Puntilla: 1

Cacerola amplia: 1

Cuchara de madera: 1


Elaboración:

Manos limpias y botellín bien frío a mano. 

En primer lugar cortamos la cebolla y y el ajo en brunoise. Reservamos el ajo.

 Ponemos a pochar la cebolla con el aceite, a fuego medio. No olvidemos la sal para que vaya sudando.

Mientras tanto con ayuda del cuchillo eliminamos los excesos de grasa de los higaditos y los cortamos al gusto. Reservamos.

Pasados unos 25 minutos la cebolla debe estar comenzando a transparentarse, añadimos el ajo, la guindilla y el pimentón. Dejamos que se cocine un par de minutos, subimos el fuego e incorporamos los higaditos. Golpe de pimienta.

Lo removemos todo bien; fuego a máxima potencia,añadimos el vino y dejamos que evapore el alcohol. Un par de minutos después cubrimos con el agua justa. Dejamos que cueza a fuego suave durante unos 20 minutos, probamos de sal y rectificamos si fuera necesario.

Nota 1: si los higaditos cuecen en exceso, pueden quedarse secos y duros.

Nota 2: si os gusta la salsa más trabada, añadir un poco de harina cuando llega el turno del pimentón.

Nota 3: no sólo a base de pan se pueden comer. Un poco de arroz blanco cocido es un acompañamiento perfecto.

Nota 4: ésta receta nos va a dar pie para elaborar una terrina fantástica.

Buena suerte y buen provecho.

 




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