Tortilla de alcachofas
La alcachofa (Cynara scolymus) según el Larousse gastronomique es"una hortaliza vivaz de la familia de las compuestas". Interesante, ¿verdad?.
Para encontrar los orígenes de la alcachofa debemos remontarnos varios miles de años. Se cree que es originaria de Egipto. Conocida y consumida por griegos y romanos por sus supuestas propiedades afrodisíacas, no es hasta el siglo XV cuando se populariza su consumo. De Sicilia salta a la Provenza y de allí a Francia. Concretamente a la corte de Catalina de Medicis.
Es una hortaliza anual pero los momentos ideales para disfrutarla son el otoño y la primavera. No la busquéis los meses más fríos como enero y febrero porque no merece la pena.
Rica en agua, fibra, sodio, potasio, fósforo, vitaminas B1, B3, C y E. Todo un portento. Son mundialmente famosas las de Tudela pero también se cultivan excelentes alcachofas en Benicarló, (Castellón), en La Rioja o Murcia.
Cuando vayáis a comprarlas aseguraos que estén bien "apretadas".
Perfectas compañeras de arroces, calderetas, menestras, rehogadas con un poco de ajo y jamón, confitadas o simplemente fritas, (mención especial a las de la Taberna El Pájaro, de la monumental Baeza).
Ingredientes para una buena tortilla
Huevos del "Cerro de la Cabaña": 5 unidades
Alcachofas frescas: 6 unidades
Sal
Pimienta negra
AOVE: 150 ml. aproximadamente
Utensilios
1 sartén anti adherente grande
1 bol
1 varilla
1 tabla
1 cuchillo cebollero
1 puntilla
1 espumadera
Papel absorvente
1 espumadera
Elaboración
Manos limpias y botellín a mano.
Ponemos el aceite en la sartén y lo calentamos suavemente.
Con ayuda de la puntilla limpiamos las hojas exteriores de las alcachofas y el tallo. Las cortamos longitudinalmente en láminas de 3 mm de grosor aproximadamente. Ponemos 2/3 partes del aceite en la sartén y las cocinamos a fuego medio bajo durante unos 20 minutos. Cuando estén tiernas, subimos el fuego a máxima potencia y las cocinamos un par de minutos para darles un toque crujiente, las escurrimos y reservamos.
Batimos los huevos con energía, incorporamos la alcachofa, salpimentamos y cuajamos la tortilla.
Para cuajar la tortilla añadimos un buen chorro de aceite, lo calentamos casi hasta que salga humo y vertemos la mezcla con cuidado. Dejar que cuaje unos 30 segundos y comenzamos a darle forma de "tiburón". Básicamente es una tortilla con la forma que se da en el País Vasco a las tortillas de bakalao.
No queremos que se cuaje en exceso así que cuidado con la intensidad del fuego y el tiempo.
Nota: si no os gusta con esa forma, la hacéis redonda y no se hable más.
Las alcachofas se oxidan rápidamente por lo que os recomiendo si no sois muy diestros limpiándolas que utilicéis un bol con agua, hielo y zumo de limón para conservarlas mientras acabáis de limpiarlas.
Buena Suerte y Buen Provecho
Comentarios
Carmen
- cuando dices que lo cortemos en láminas... ¿cómo se hace eso en una alcachofa?
- para cocinarlas, ¿echamos un poco de aceite sólo como si las hiciéramos medio a la plancha o cómo?
Un abrazo!
1.- Una vez limpias, las cortamos longitudinalmente. Con tallo o sin el. A mí personalmente me encantan los tallos.
2.- Ponemos 2/3 partes del aceite aproximadamente en la sartén. Quedan casi confitadas y cuando estén listas es cuando subimos el fuego para que tengan el toque crujiente.
Otro abrazo para ti.