Arroz con costillas adobadas y huevos fritos

¿Hay algo mejor que la yema de un huevo de "corral" recién frito?

Pues sí, mezclarla con algún ingrediente que os resulte suculento. En este caso el elegido para la combinación ha sido un arroz seco con costillas de cerdo adobadas, (un capricho de mi Suegra). Huevo frito, pimentón, arroz, costillas deliciosamente tiernas... Es tiempo de matanza así que vamos a aprovechar los productos que nos brinda.

Ingredientes para 4 personas

Arroz: 300 gramos

Costillas adobadas: 350 gramos

Pimiento rojo:  1/2 unidad

Cebolla: 1 unidad

Ajo:1 diente

Laurel: 1 hoja

Caldo: 900 gramos

Pimentón agridulce:1 cucharada

Tomate:1 unidad

Azafrán: 1 gramo

AOVE

Sal

Huevos: 4 unidades

Agua

Carne de pimiento choricero: 1 cucharada

Vino blanco: c.s.

Utensilios

1 tabla para picar

1 cuchillo cebollero

1 paella de 50/55 cm de diámetro

1 espumadera

1 sartén anti adherente mediana

1 cuchara de madera

1 olla rápida

1 rallador

Elaboración

Manos limpias y un par de botellines a mano.

Ponemos una buena cantidad de aceite en la olla rápida, añadimos un diente de ajo machacado y las costillas. Lo sofreímos todo hasta que adquiera un bonito color dorado. Retiramos una parte del aceite y lo depositamos en la paella. A continuación, añadimos un chorro de vino blanco, cubrimos de agua, tapamos y cuando la olla alcance la presión necesaria, (segundo anillo naranja),  bajamos la intensidad del fuego y dejamos que cueza 30 minutos. Rallamos el tomate y lo reservamos.

Mientras las costillas se cocinan vamos a preparar el sofrito. Añadimos un chorro de aceite a la paella junto con la grasa resultante de dorar las costillas y, lo calentamos. Picamos la cebolla en brunoise junto con el pimiento rojo y el ajo. Lo añadimos a la paella y lo sofreímos durante unos 25 minutos. Incorporamos el pimentón y lo cocinamos unos segundos; a continuación añadimos el tomate rallado.

Cocinamos otros 5 minutos.

Despresurizamos la olla, sacamos las costillas y las desmigamos con mucho cuidado de no quemarnos los dedos demasiado. Reservamos por un lado la carne y por otro el caldo.

A estas alturas, debemos tener un fabuloso sofrito en nuestra paella. 

Subimos el fuego, sofreímos el arroz durante un minuto y añadimos el caldo. A continuación, las costillas desmenuzadas.

Cocemos a fuego vivo 5 minutos y después bajamos el fuego al mínimo. Añadimos el azafrán y dejamos que cueza otros 13 minutos aproximadamente.

Cuando el arroz esté listo, freímos los huevos y los ponemos sobre el mismo.

Romper los huevos y mezclar bien antes de servir.

Nota: la olla  rápida que utilizamos en casa es una Perfect de WMF.

Buena Suerte y Buen Provecho.