Pollo asado
Hace días, nos enfrentábamos a un pollo en salsa y hoy le toca el turno a uno de los grandes clásicos de nuestra gastronomía; el pollo asado. Comida de fin de semana por antonomasia; fiel compañero de patatas y pimientos fritos. Sencilla, pero que requiere ciertas reglas para que todo salga como debe. Crujiente por fuera y jugoso por dentro. La que presentamos hoy es una de las formas que hacemos en casa, pero os mostraremos más en sucesivas recetas.
Ingredientes para 4 personas
Pollo: 1 pieza de unos 2.5 a 3 kg
Cebolla dulce: 1 unidad
Ajo morado: 2 dientes
Manzana golden: 1unidad
Cerveza: 1 lata o 2
Agua: c.s.
Sal
Pimienta
AOVE
Tomillo
Laurel: 1 hoja
Manteca de cerdo: 1 cucharada sopera
Caldo doble: 1 pastilla
1 limón
Utensilios
1 horno
1 bandeja de horno
1 puntilla
1 tabla
1 cuchillo cebollero
1 thurmix o similar con su vaso
Palillos
1 colador
1 cazo
1 brocha
Elaboración
Manos limpias y botellín frío. Empezamos.
En primer lugar precalentamos el horno a 150º. Pelamos, picamos la cebolla en juliana y la colocamos en el fondo de la bandeja junto al aceite, los dientes de ajo, el laurel y el tomillo deshojado.
Salpimentamos el pollo por dentro y por fuera. Le introducimos la manzana pelada y cortada a la mitad. Lo cerramos con ayuda de un par de palillos. Derretimos ligeramente la manteca y lo pintamos con ella. Si podemos colocar un poco entre la piel y la carne de la pechuga, perfecto. Regamos con la primera cerveza, añadimos la pastilla de caldo y al horno.
La primera hora y media no moveremos la temperatura, y a partir de los 45 primeros minutos, comenzamos a regar las pechugas con el jugo. Si vemos que se queda corto, abrimos la otra cerveza y le vamos agregando.
Transcurrido ese tiempo subimos la temperatura a 180º y lo horneamos media hora más. Seguimos regando la pechuga durante ese tiempo. Los últimos 15 minutos subimos el horno a 210º / 220º para conseguir el dorado final.
Retiramos el pollo de la bandeja, le sacamos la manzana, (que añadiremos a la salsa), y vertemos la salsa de la bandeja en el vaso de la batidora. La trituramos y la pasamos por el colador. La reducimos en un cazo 5 minutos y rectificamos, si fuera necesario. Servimos aparte.
Nota: servir acompañado de patatas fritas o asadas, arroz blanco, pimientos fritos, una ensalada de lechuga y cebolleta o todo a la vez. Cabe la posibilidad de asar las patatas cortadas en gajos en la misma fuente en la que asamos el pollo; para que se impregnen del jugo del asado. También podemos asarlas en una bandeja distinta, (enteras eso sí).
Nota 2: ya hablaremos del tratamiento de las carnes en salmuera. Para ablandarlas y dejarlas más jugosas...
Nota 3: si no queréis triturar la salsa pues no pasa nada. La coméis así. Procurar que no haya demasiado salsa en la bandeja para que no se cueza la carne.
Buena Suerte y Buen Provecho.
Comentarios
También puedes hacerlas fritas. Lavadas, secadas y sin pelar. Aceite suave primero, (140º/150º) hasta que estén blandas. Las retiramos, subimos el aceite a 180º grados aproximadamente y las introducimos un par de minutos para que queden doradas y crujientes. Escurrir, salar y servir.